ESTATUTOS
ESTATUTOS
ESTATUTOS
Los Estatutos de nuestra Cofradía han experimentado numerosos cambios a lo largo de la historia desde su fundación, adaptándose a los tiempos y necesidades de los hermanos. Realizando un recorrido por ellos destacan los Estatutos fundacionales de nuestra Hermandad, que fueron entregados por primera vez a los hermanos el 7 de marzo de 1926. Distintos Estatutos se han sucedido desde entonces, recogiendo en una primera etapa el carácter benéfico de la Cofradía.
Según recogen las actas, “la hermandad no quería dejar de lado otro uno de los temas que más le preocupaba en su joven existencia, como era la conversión en Sociedad Benéfica, por eso se convocó una junta general extraordinaria el 7 de agosto de 1927 con la finalidad de redactar un nuevo reglamento benéfico. Este sería redactado por la junta directiva el 19 de agosto una vez que entre todos habían discutido los distintos artículos, y aunque se aprobó dos días después por todos los socios, de nuevo fue el señor Parra quien pidió que aún no entrara en vigor por no disponer la Hermandad de fondos suficientes”.
Un año más tarde, en 1928 se retoma la puesta en marcha de la sección benéfica. “El presidente no tiene más remedio ante la insistencia de la asamblea de prometer que en breves fechas entrarán en vigencia los estatutos del reglamento benéfico con algunas modificaciones en su articulado, rectificándose los artículos 5, 15 y 28, pero haciendo la salvedad que hasta que la hermandad no juntara un fondo suficiente para empezar a prestar socorros a los socios, no se produciría la entrada en vigor de la sociedad benéfica, lo que no llegaría a ocurrir hasta el 1 de Agosto de ese año”.
Ya en 1941, la hermandad siguió trabajando para volver a ser cofradía benéfica, “pero al no disponer de suficiente fondo, se decidió en la asamblea celebrada en el mes de septiembre, permanecer solamente con el carácter religioso y esperar un tiempo hasta que la cofradía estuviese económicamente más desahogada. Por eso aún no estaban incluidas las prestaciones benéficas en los nuevos Estatutos que se presentaron este mismo día”.
Unos años más tarde, en 1944, y después de varios meses dedicados a la redacción de unos nuevos Estatutos, por fin pueden ser presentados en la asamblea general que la hermandad celebra en el mes de febrero. El señor presidente comunica a todos los socios que el reglamento benéfico podrá entrar en vigor a partir del mes de marzo, con la consiguiente satisfacción de la asamblea.
En agosto de 1955 se creó una comisión con la finalidad de estudiar el reglamento y reformar algunos de sus artículos. Tardó la comisión dos meses en revisarlos y una vez puestos al día fueron imprimidos en el mes de octubre para ser entregados a cada socio, naturalmente una vez que recibieron el visto bueno del Sr. Obispo D. Rafael García de Castro.
El nuevo reglamento benéfico contaba con nueve capítulos y cincuenta y seis artículos. Hay diversas curiosidades dentro del nuevo reglamento, por ejemplo: La hermandad no desaparecería mientras hubiera seis hermanos empeñados en continuar con su labor benéfica. Para poder ingresar en la cofradía como hermano benéfico, se necesitaba tener menos de cuarenta y cinco años de edad y gozar de buena salud, para eso era imprescindible aportar un certificado médico. La cuota mensual era de cinco pesetas, mientras que si el socio caía enfermo la cofradía se comprometía a socorrerlo con siete pesetas diarias. La junta directiva responsable de la redacción de los mismos estuvo compuesta por el presidente D. Pedro Parra López, el vicepresidente D. Francisco Sabariego Palacios y el tesorero D. Francisco Madrid Ruiz. Levantó acta el secretario D. Juan Andrés Obra Santisteban.
Años después, la Junta Directiva presidida como Hermano Mayor por D. Pedro Blanco Vera abordó el proceso de reforma y adaptación de los Estatutos de la Hermandad para mejorar diversos aspectos de la vida de la Cofradía que lo precisaban, los cuales fueron redactados conforme a la autorización que a la Junta Directiva le confirió la Asamblea General del día 12 de febrero del año de gracia de 1984, año Santo de la Redención promulgado por S.S. Juan Pablo II, y ratificados por la Autoridad Eclesiástica, constituyendo el superior texto normativo de esta Cofradía por el que nos regimos hoy en día.
REGLAMENTO DE RÉGIMEN INTERNO
La Junta de Gobierno presidida como Hermano Mayor por D. Sebastián Latorre Ruiz se propuso a través de un nuevo Reglamento de Régimen Interno desarrollar y completar, en su letra y en su espíritu las lagunas y deficiencias de nuestros vigentes Estatutos, sin otro fin que el de ahondar y mejorar la vida de nuestra Cofradía para así cumplir mejor nuestro compromiso cristiano. El presente Reglamento de Régimen Interno fue leído en Junta de Gobierno celebrada en la Casa de Hermandad en marzo de 2009, y aprobado en Asamblea General celebrada en la Casa de Cofradías el día 22 de marzo de 2009, y modifica al anterior Reglamento de Régimen Interno, aprobado en 1996 y que ha estado vigente hasta la aprobación del presente.